🌸Raquel de Abril🌸 rated Todos somos líquenes: 5 stars
Todos somos líquenes by Scott F. Gilbert, Jan Sapp, Alfred I. Tauber
Éste es un ensayo acerca de los seres vivos como producto de una ecología, una evolución y un desarrollo. Aunque …
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Éste es un ensayo acerca de los seres vivos como producto de una ecología, una evolución y un desarrollo. Aunque …
Podría decir que esta novela te hace pensar, pero seguidamente tendría que matizar: a lo que te lleva es a un ”pensamiento cálido“, es decir, no al análisis o la crítica intelectualizada, sino al pensamiento de la vida, siempre entreverado de afectos, pensamiento hecho él mismo de afectos. Temas complejos como la naturaleza de la conciencia, las relaciones familiares, el sentido de la vida, la identidad, la muerte, la relación con naturaleza, el papel de la tecnología... aparecen plasmados aquí sin grandilocuencia pero sí en toda su sencilla profundidad. A través del encuentro entre entrañables protagonistas, de orígenes y naturalezas diferentes, se produce un intercambio y un enriquecimiento recíproco que los transforma a ambos, y yo diría que también al lector. Todo el ritmo de la novela, que no es excesivamente larga, es tranquilo, sosegado, y se siente precisamente como ese rato de tomar el té, donde uno calienta el …
Podría decir que esta novela te hace pensar, pero seguidamente tendría que matizar: a lo que te lleva es a un ”pensamiento cálido“, es decir, no al análisis o la crítica intelectualizada, sino al pensamiento de la vida, siempre entreverado de afectos, pensamiento hecho él mismo de afectos. Temas complejos como la naturaleza de la conciencia, las relaciones familiares, el sentido de la vida, la identidad, la muerte, la relación con naturaleza, el papel de la tecnología... aparecen plasmados aquí sin grandilocuencia pero sí en toda su sencilla profundidad. A través del encuentro entre entrañables protagonistas, de orígenes y naturalezas diferentes, se produce un intercambio y un enriquecimiento recíproco que los transforma a ambos, y yo diría que también al lector. Todo el ritmo de la novela, que no es excesivamente larga, es tranquilo, sosegado, y se siente precisamente como ese rato de tomar el té, donde uno calienta el cuerpo y también el espíritu. Las humanísimas inquietudes de le monje y la inocente aunque sabia mirada del robot, en ese entorno basado en la sostenibilidad y el respeto hacia los demás seres con los que compartimos naturaleza, me han hecho sentir transportada e inmersa y me han hecho llegar la sensación de bienestar y la alegría de vivir. 'Monje y robot', en conclusión, tiene la virtud de ser una especie de utopía no ingenua ni "mesiánica", porque hace cuentas muy hermosamente con el hecho de que incluso en una sociedad donde se haya superado el conflicto de clases y el conflicto con la naturaleza, las personas no dejarán de preguntarse por el sentido, de buscar su identidad desplegando una diversidad de formas de vivir y de tener el deseo de explorar y conocer lo desconocido.
Me empiezo hoy esta novela que me recomendó @Humocefalo@comelibros.club / @Humocefalo@masto.es y que, por lo que me ha dicho, tiene un tono luminoso que ahora me es más que necesario después de mi última lectura...
Me termino hoy esta novela que empecé creyendo un relato inocente sobre jóvenes adolescentes en su despertar filosófico... y que acabo con el corazón encogido, aún indecisa sobre lo que pienso sobre esta historia que, en realidad, no tiene nada de inocente, sino que se vuelve crecientemente oscura y descarnada. No sé si es mejor no decir nada más al respecto, y que el lector simplemente se deje llevar (en cuyo caso, te recomiendo dejar de leer esta reseña) o si advertir sobre la dureza de esta lectura, que lleva a las últimas consecuencias la huida hacia adelante de un grupo de adolescentes que se niega a admitir la posibilidad de que la vida no tenga un sentido... Sea como sea, la escritura de Janne Teller es absolutamente eficaz en este propósito. Genera un suspense psicológico que a partir de los primeros capítulos absorbe al lector en una creciente mezcla …
Me termino hoy esta novela que empecé creyendo un relato inocente sobre jóvenes adolescentes en su despertar filosófico... y que acabo con el corazón encogido, aún indecisa sobre lo que pienso sobre esta historia que, en realidad, no tiene nada de inocente, sino que se vuelve crecientemente oscura y descarnada. No sé si es mejor no decir nada más al respecto, y que el lector simplemente se deje llevar (en cuyo caso, te recomiendo dejar de leer esta reseña) o si advertir sobre la dureza de esta lectura, que lleva a las últimas consecuencias la huida hacia adelante de un grupo de adolescentes que se niega a admitir la posibilidad de que la vida no tenga un sentido... Sea como sea, la escritura de Janne Teller es absolutamente eficaz en este propósito. Genera un suspense psicológico que a partir de los primeros capítulos absorbe al lector en una creciente mezcla de curiosidad y horror y que no se agota hasta la última página y donde lo más angustioso y a la vez genial en su elección estilística es que la narradora sea una de las adolescentes partícipes de la historia, que nos mantendrá en su punto de vista oscilante entre la férrea convicción y el desquicie ante la cada vez más truculenta búsqueda del significado... Lo más increíble es que incluso en medio del esperpento ha habido pasajes que me han hecho reír en alto. Si es una novela moralizante, no tengo del todo claro adónde quería llevarnos Janne Teller (aunque con su nota en el posfacio me hago una idea, con la que no diría que estoy del todo de acuerdo) y quizá esté precisamente ahí el quid de la historia.
Il barone rampante es una novela a la vez entrañable, divertida y emocionante. Es capaz de combinar diversidad de géneros; es al mismo tiempo novela de formación, histórica, de aventuras e incluso romántica, todo ello atravesado por el toque fantasioso que le confiere su misma premisa: el resoluto hijo de un barón de finales del siglo XVIII que decide subirse a un árbol y no volver a tocar tierra, cuyas peripecias vividas desde las copas de los árboles de todo un valle serán narradas por su hermano pequeño. Es una historia fresca, ligera de leer pero no por ello en absoluto frívola, por lo que la recomiendo encarecidamente para quien busque una lectura de este tipo. Además, leyéndola a una se le llenan los ojos del verde de la variada vegetación que pasa a ser el hábitat de Cosimo, del azul de su cielo y de su mar, y los …
Il barone rampante es una novela a la vez entrañable, divertida y emocionante. Es capaz de combinar diversidad de géneros; es al mismo tiempo novela de formación, histórica, de aventuras e incluso romántica, todo ello atravesado por el toque fantasioso que le confiere su misma premisa: el resoluto hijo de un barón de finales del siglo XVIII que decide subirse a un árbol y no volver a tocar tierra, cuyas peripecias vividas desde las copas de los árboles de todo un valle serán narradas por su hermano pequeño. Es una historia fresca, ligera de leer pero no por ello en absoluto frívola, por lo que la recomiendo encarecidamente para quien busque una lectura de este tipo. Además, leyéndola a una se le llenan los ojos del verde de la variada vegetación que pasa a ser el hábitat de Cosimo, del azul de su cielo y de su mar, y los oídos del canto de los pájaros y de las voces –polifónicas y plurilingües– de los variopintos habitantes y transeúntes del valle.
"The twenty-three essays comprising this book focus in turn of the procurement of livelihood, on what it means to 'dwell', …
Me termino hoy esta colección de ensayos que me lleva acompañando todo el verano, a la vez que la propia estación del verano se termina... ¡Qué pena me da! Este libro ha sido realmente un viaje, lleno de estímulo intelectual y personal, sin duda ha dejado una huella en mi pensamiento y forma de mirar el mundo. Ya no me quedan capítulos nuevos que leer (a cada uno lo recibía con gran entusiasmo por la cantidad de puertas que me abría) y es hora de la despedida, pero, por suerte, lo tengo en mi estantería y podré volver a él todas las veces que necesite.
La intriga de esta novela es destacable por el modo en que, si bien es indiscutiblemente de género policiaco (y, en este sentido, sus personajes son más bien estereotipados), el desarrollo del caso (el asesinato de una joven cuya identidad se desconoce) es inseparable de la geografía de la ciudad en que tiene lugar. Y es esa intrincada geografía urbana, al borde de lo imposible, que no se sabe muy bien si está configurada por los principios de la fantasía, de la ciencia-ficción o de una distópica psicología, lo que más me ha enganchado desde el inicio de la lectura. El autor juega muy bien con esta ambigüedad, con las expectativas del lector de los géneros en cuestión, dando como resultado lo que para mí es todo un experimento/experiencia o, siguiendo el recorrido del detective protagonista, todo un viaje en un sentido fuera de lo «topordinario».
Esta novela sumerge al lector breve pero muy apasionadamente en las turbulentas veinticuatro horas que marcaron la memoria de una mujer, durante las que una ludopatía desenfrenada, una pasión improbable y los puritanos valores de la clase burguesa de finales del siglo XX y principios del siglo XX chocan entre sí. Mantiene en vilo al lector durante cada página y le hace preguntarse por el poder de las pasiones para sacudir una vida entera.
Es perfecta para leerla de una sentada en una tarde anodina.
Tiene usted toda la razón: la verdad a medias no tiene ningún valor; sólo la tiene la que se expone íntegramente.
La justicia pública decide seguramente sobre esas cosas con mayor severidad que yo; ella tiene el deber de proteger despiadadamente las costumbres establecidas y las convenciones legales; está obligada a juzgar y no a disculpar. Yo, sin embargo, en tanto que persona privada, no …
Esta novela sumerge al lector breve pero muy apasionadamente en las turbulentas veinticuatro horas que marcaron la memoria de una mujer, durante las que una ludopatía desenfrenada, una pasión improbable y los puritanos valores de la clase burguesa de finales del siglo XX y principios del siglo XX chocan entre sí. Mantiene en vilo al lector durante cada página y le hace preguntarse por el poder de las pasiones para sacudir una vida entera.
Es perfecta para leerla de una sentada en una tarde anodina.
Tiene usted toda la razón: la verdad a medias no tiene ningún valor; sólo la tiene la que se expone íntegramente.
La justicia pública decide seguramente sobre esas cosas con mayor severidad que yo; ella tiene el deber de proteger despiadadamente las costumbres establecidas y las convenciones legales; está obligada a juzgar y no a disculpar. Yo, sin embargo, en tanto que persona privada, no veo por qué he de adoptar el papel de juez; prefiero actuar de defensor. Personalmente, me causa mayor satisfacción comprender a los hombres que condenarlos.
Ensayo en el que se presenta la concepción del absurdo de Camus, que, si bien se apoya sobre las filosofías de la existencia que le preceden, marca una línea de distancia. De ellos (de Kierkegaard, Chestov, Dostoyevski, Jaspers) recoge su descripción de la sensación de absurdo, pero critica sus conclusiones. Mientras que para Camus el hombre absurdo debe mantenerse en un estado de lucidez, que no pretenda evitar o anular el absurdo, los filósofos precedentes proponían un "salto" cargado de esperanzas de carácter religioso. Así pues, partiendo de la pregunta inicial de si es posible seguir viviendo -es decir, no suicidarse- una vez se ha tomado conciencia de que la vida no tiene sentido, Camus delinea la figura del hombre absurdo: su forma de vivir la vida y de amar, su ética (una "moral de la cantidad") y su estética.
No comparto en casi nada los planteamientos de Camus, si …
Ensayo en el que se presenta la concepción del absurdo de Camus, que, si bien se apoya sobre las filosofías de la existencia que le preceden, marca una línea de distancia. De ellos (de Kierkegaard, Chestov, Dostoyevski, Jaspers) recoge su descripción de la sensación de absurdo, pero critica sus conclusiones. Mientras que para Camus el hombre absurdo debe mantenerse en un estado de lucidez, que no pretenda evitar o anular el absurdo, los filósofos precedentes proponían un "salto" cargado de esperanzas de carácter religioso. Así pues, partiendo de la pregunta inicial de si es posible seguir viviendo -es decir, no suicidarse- una vez se ha tomado conciencia de que la vida no tiene sentido, Camus delinea la figura del hombre absurdo: su forma de vivir la vida y de amar, su ética (una "moral de la cantidad") y su estética.
No comparto en casi nada los planteamientos de Camus, si bien sí he disfrutado sobre todo de su capítulo dedicado a la creación artística, donde critica la tradicional oposición entre filosofía y arte:
El artista, lo mismo que el pensador, se empeña y se hace en su obra. Esta osmosis plantea el más importante de los problemas estéticos. Además, nada más inútil que estas distinciones según los métodos y los objetos para quien se convence de la unidad de propósito del espíritu. No hay fronteras entre las disciplinas que el hombre se propone para comprender y amar. Se interpenetran y la misma angustia las confunde.
No puedo sin insistir en lo disfrutable que me parece la prosa ensayística de Ortega, con su característico estilo a la vez claro y floreado, con su persuasiva y carismática oratoria, con ese discurrir que avanza trazando meandros (o, como él plantea en estas lecciones, en espiral), en una cadencia sugestiva e hipnótica.
El núcleo fundamental de este texto es la noción orteguiana de la vida como realidad radical, a la que se llega a través de una serie de etapas en las que se esgrime la crítica al idealismo y se tocan numerosos temas que Ortega aborda en otros de sus textos (como la doctrina de las generaciones y del amor).
No puedo no darle cinco estrellas, lo he disfrutado en forma y en fondo.