Este libro me ha sorprendido para bien. Comencé a leerlo sin tener muy claro su argumento, y casi diría que ha sido un acierto hacerlo así.
La ambientación que hace Jesús Cañadas del Cádiz de finales del siglo XIX y principios del XX es magistral. Ha conseguido que por momentos me viese allí, como un protagonista más de la novela.
Los capítulos son por regla general cortos, y la historia está muy bien estructurada, con varios saltos al presente y al pasado. Como único punto negativo resaltaría el exceso de giros en el argumento. Esta es una opinión muy personal, porque estoy seguro de que hay gente a la que eso le gustará. Pero a mí me llega a resultar algo excesivo, aunque me sigue pareciendo un libro muy recomendable.
Un género como el de la fábula, de formato breve y centrado en la observación …
En un lejano país existió hace muchos años una Oveja negra.
Fue fusilada.
Un siglo después, el rebaño arrepentido le levantó una estatua ecuestre que quedó muy bien en el parque.
Así, en lo sucesivo, cada vez que aparecían ovejas negras eran rápidamente pasadas por las armas para que las futuras generaciones de ovejas comunes pudieran ejercitarse también en la escultura.
Un amanecer de 1945, un muchacho es conducido por su padre a un misterioso lugar …
¡Ah pero qué bonito libro! Da gusto recibir lecturas sin pretenciones y que se convierten en un bálsamo para el alma.
Está lleno de sabiduría popular, la mejor sabiduría si me preguntan a mí, de humor, intriga, amor fuera de los estándares (aunque romántico, eso sí)... Pero el que todo gire en torno a los libros, lo hace entrañable para mí.
Lo terminé con un escalofrío y eso le abre la puerta para sumarse a mi lista de favoritos.
Es la segunda vez que la leo y me parece una obra genial, especialmente recomendable para personas que alguna vez se hayan sentido solas y obsesionadas por algo. El argumento es simplemente apasionante, con un misterio que te deja atónito desde la primera página. En ese sentido la obra sorprende por su modernidad.
Recuerdo que el libro tuvo una especie de renacimiento cuando echaban la serie Perdidos, por ser una de sus fuentes de inspiración. Es curioso que, al igual que ocurría en dicha serie, la trama tiene más interés cuando se está desarrollando que cuando las cartas se ponen encima de la mesa, descubiertas. La novela no se parece en nada a la serie, ni tiene un final tan bochornoso, que nadie trace una analogía en ese sentido, pero a mí me hubiera gustado un final para la novela un poco más ambiguo en el que el misterio y …
Es la segunda vez que la leo y me parece una obra genial, especialmente recomendable para personas que alguna vez se hayan sentido solas y obsesionadas por algo. El argumento es simplemente apasionante, con un misterio que te deja atónito desde la primera página. En ese sentido la obra sorprende por su modernidad.
Recuerdo que el libro tuvo una especie de renacimiento cuando echaban la serie Perdidos, por ser una de sus fuentes de inspiración. Es curioso que, al igual que ocurría en dicha serie, la trama tiene más interés cuando se está desarrollando que cuando las cartas se ponen encima de la mesa, descubiertas. La novela no se parece en nada a la serie, ni tiene un final tan bochornoso, que nadie trace una analogía en ese sentido, pero a mí me hubiera gustado un final para la novela un poco más ambiguo en el que el misterio y las especulaciones iniciales se prolongaran un poco. Las explicaciones finales me parecen demasiado evidentes, como en una peli de Nolan.
Otra de las cosas que pueden echar un poco para atrás es el estilo narrativo, que en su primera mitad resulta bastante intrincado. El narrador y protagonista puede desesperar un poco con sus disertaciones y sus cambios de tema, aunque ello también le da un toque de alucinación al personaje que es totalmente compatible con lo que está sucediendo. Después la sensación es que el desarrollo coge más ritmo, aunque no sé si es porque uno ya se acostumbra. No he leído nada más del autor, así que no sé hasta que punto esta manera de contar es propia del modernismo de la órbita de Borges o bien es algo creado had hoc para esta obra.
Una divertida y entrañable historia sobre la resistencia frente al invasor alemán durante la Segunda …
Trenes que hay que dirigir, controlar, la vida en una estación...
4 stars
Qué final más humano y hermoso (y duro) tiene este libro. Pleno de ternura y de una búsqueda tentativa de lo que es justo. Qué prosa la de Hrabal al que vuelvo después de años, ya tenía ganas.
En esta obra está su humor habitual, su tratamiento hondo de la crudeza y el dolor pero desde una superficialidad aparente; sutileza o ligereza, más bien. Está la aparente inocencia de sus personajes y voces narrativas. La novela la narra un chico jovencísimo que no sabe de la vida pero sabe de contemplarla a través de su especial sensibilidad de hombre no tocado por los tejemanejes de la apariencia. Eso a pesar de que está inmerso en una situación la mar de complicada: la guerra y sus consecuencias sobre la vida. Lo de Hrabal es poner ante nuestros ojos una especie de inocencia harapienta, una fantasía que nos descubre justo debajo de …
Qué final más humano y hermoso (y duro) tiene este libro. Pleno de ternura y de una búsqueda tentativa de lo que es justo. Qué prosa la de Hrabal al que vuelvo después de años, ya tenía ganas.
En esta obra está su humor habitual, su tratamiento hondo de la crudeza y el dolor pero desde una superficialidad aparente; sutileza o ligereza, más bien. Está la aparente inocencia de sus personajes y voces narrativas. La novela la narra un chico jovencísimo que no sabe de la vida pero sabe de contemplarla a través de su especial sensibilidad de hombre no tocado por los tejemanejes de la apariencia. Eso a pesar de que está inmerso en una situación la mar de complicada: la guerra y sus consecuencias sobre la vida. Lo de Hrabal es poner ante nuestros ojos una especie de inocencia harapienta, una fantasía que nos descubre justo debajo de la piel de lo cotidiano, de lo común, una que sabe mostrar la herida abierta pero que no sobreactúa, que no grita, que no se sorprende porque entra dentro de lo real el que los cuerpos sangren, las sociedades estén llenas de aristas y las vidas sean de todo menos acomodadas. Hay algo de cuento de hadas oscuro en cómo se nos cuenta esta historia. También vemos el toque de picaresca que suele dar a sus personajes. Como buenos seres asociales o apartados de alguna manera de la corriente normativa son juguetones, jocosos y algo distantes también; una picaresca bufa que sirve para afrontar el mundo espinoso, con sus lucientes y embriagadores momentos de belleza (qué bien hace esto, Hrabal, engarzar la belleza en la basura, en el hollín, en la muerte y la escoria), sin héroes, lleno de cotidianidad aumentada, carnal, palpable.
Hay un candor en la prosa de este autor que no he visto en nadie. Quizás este ‘Trenes rigurosamente vigilados’ no llega a la altura de ‘Una soledad demasiado ruidosa’, obra que no me cansaré de releer, pero sí que es un libro más diáfano, más claro y lineal; por ello, puede que más apropiado para ir conociendo el mundo narrativo de este genio checo.
@me_llaman_sati@tkz.one Genial, me los apunto por si acaso. De todas formas buscaré por ahí algún orden de lectura de todos los libros, o esto puede ser un caos 🤦🏻♂️
A Patricia Campbell su existencia nunca le ha parecido tan insignificante. Su marido es un …
No podrás dejar de leerlo
5 stars
Es una historia de terror dura, pero escrita de una manera que hace que la lectura sea adictiva.
Entre el terror relacionado con la temática vampírica y el terror relacionado con la vida real (luz de gas, racismo, machismo...), el libro rezuma horror en todas sus páginas.