Interesante texto de Engels en el que analiza el comienzo de la primera república española, y sobre todo, el papel de la sección española de la Internacional, por entonces dominada por las ideas anarquistas-bakuninistas en las diferentes federaciones del estado, en ese periodo. Muestra como el conjunto de la Internacional renunció a de forma organizada a plantar cara al estado (por aquel entonces muy debilitado y con un ejército descompuesto) y plantear una alternativa obrera, por el rechazo de el bakuninismo dominante a tomar el poder, promoviendo por el contrario la libertas de acción individual de cada obrero de de alistarse y participar en los partidos burgueses y gobiernos de los cantones independientes que formaron en varias ciudades los burgueses republicanos extremistas, conocidos como intransigentes.

El resultado fue la práctica disolución de la Internacional en España y un desprestigio del movimiento obrero del que aún tenemos cargas.