Ya nunca mas se escucharán aquellas voces de las pescadoras invitando a la compra, seguidas cual procesión gatuna, por felinos al acecho de alguna pieza que llevarse a la boca: "¡Chachaaaaa! ¡Los peeeeeeces!"
— Callejeando por Esparragosa de Lares by Vicky Jiménez Milara (Page 48)