Marta reviewed Un guiso de lentejas by Ricardo García Pérez
Review of 'Un guiso de lentejas' on 'Goodreads'
3 stars
Tomo esta lectura en un momento de desgana en el que ni la lectura ni la escritura me dicen mucho. Mi opinión, seguro, lleva una carga pesada de sesgos apáticos y no sé si aportará mucho.
Empieza el texto con lo que me pareció un mucho contar y cero mostrar. Se hace cuesta arriba. ¿Es lo que se llevaba? No sé.
A pesar de un arranque algo pobre, coge ritmo después, pero no llego a meterme bien en la historia. Sí que me han gustado algunas escenas particulares, pero no terminé de empatizar con los personajes, que son muchos y variados, y la historia no consiguió cautivarme. Quizá esperaba más peso de complicidad entre Rachel y Hester, más amistad, más señoras sobreviviendo en el mundo de los hombres.
¿Qué está bien en todo esto? Los varios estratos sociales mezclándose, con sus máscaras; los roles de género, el desafío de las protagonistas ante la imposición del "por nacimiento" o por ser mujer; los contrastes entre unos personajes y otros, todos llenos de excesos y defectos. Los puntos de vista bien definidos de cada uno de ellos y cómo una misma realidad se interpreta de múltiples maneras.
¿Lo recomiendo? Bueno, con esta racha de apatía lectora que me causa desencanto de cualquier lectura, no recomiendo ninguna. Intento sacarme este mal de encima y ver el libro de una forma más objetiva, pero no lo consigo
Si te interesa un entorno victoriano, la sociedad del momento creo que está bien reflejada, sobre todo porque toca puntos de vista diferentes que muestran la realidad de distintos grupos sociales; lo que pasa también por crítica social, especialmente satiriza al clero, la labor o la función social de la iglesia.
Si buscas una historia de amor, tienes la de amor correspondido, la de amor no correspondido, el triángulo amoroso...
También, dentro de la crítica, nos habla de cómo la condición sexual de nacimiento puede condicionar tu vida, pero también de desafiar la imposción social, que es posible salir del encasillamiento obligado, lograr la independencia económica y ser tú misma, con tus intereses y tu vida tuya, y no de un hombre.
Hay un poco de todo porque, al cabo, es un guiso de lentejas.