Brandon Sanderson nos trae el final del primer arco de esta saga que se ha convertido en un referente moderno de la fantasía.

Este libre no defrauda, se hace muy ameno de leer y se nota la madurez en la escritura de Sanderson. Aunque tiene en algunos algunos evoluciones inconsistentes del ritmo a lo largo del libro, se podría decir que es una «sanderchada» de la saga, lo cual hace a su vez que el momento de éxtasis al que nos tiene acostumbrado Sanderson, en esta ocasión sea más disperso a lo largo del libro en lugar de acumularse en un único momento.

Pero es genial volver a Roshar, ver el primer desenlace de esta historia llena de autosuperación, emociones y filosofía. Espero que el segundo arco vuelva pronto.