A inicios de la década de 1990, Coca-Cola anunció su objetivo de fabricar botellas con un 25 por ciento de plástico reciclado, pero lo abandonó cuatro años más tarde, una vez disipadas la presión política y la atención de los consumidores. En 2007, la empresa volvió a copar los titulares cuando se propuso «reciclar o reutilizar el 100 por ciento de sus botellas de plástico en Estados Unidos» y, para lograrlo, abrió la «planta de reciclaje de PET más grande del mundo» en Spartanburg, Carolina del Sur. En realidad, la empresa no cumplió su objetivo y cerró calladamente la planta dos años después. ¿Y qué hay del objetivo de Coca-Cola de utilizar un 10 por ciento de plástico reciclado en sus botellas para 2010? Lo incumplió. Se fijó un objetivo del 25 por ciento de contenido reciclado en sus botellas para 2015 y no logró alcanzar ni la mitad de esa cifra.

— Vertedero by Oliver Franklin-Wallis