“Reunidos varios de los oficiales sublevados en una Junta de Defensa Nacional —24 de julio de 1936—, su vocal más destacado, el general Emilio Mola, demostró hasta qué punto no querían atarse políticamente las manos al expulsar de la zona nacionalista a Juan de Borbón —sexto hijo del exiliado Alfonso XIII y primero en la línea de sucesión— cuando este cruzó la frontera y se presentó en Burgos como voluntario para combatir en el mes de agosto.”