Me gustó mucho
5 stars
Como persona nacida en 1998, disfruté de todas las películas de Harry Potter durante mi infancia y adolescencia. Alguna vez, cuando estaba en la primaria, comencé a leer este libro y no lo terminé. Ahora, en 2024, al proponerme el desafío de mantenerme activo en la lectura en inglés, decidí que uno de mis objetivos debía ser leer algún libro entero en esta lengua. Es así que llegué a la conclusión de leer la versión en inglés del primer libro de Harry Potter. De esta manera cumplí dos objetivos: el planteado en 2024 y el de realizar aquellas tareas pendientes de la infancia.
Recomiendo con mucho entusiasmo leer este libro. Me parece que la principal virtud que muestra acá J.K. Rowling es su habilidad para introducirnos en un mundo distinto. Lo nuevo, en cada párrafo, es presentado con cuidado, sin generar agobio, con la naturalidad con la que aprende un …
Como persona nacida en 1998, disfruté de todas las películas de Harry Potter durante mi infancia y adolescencia. Alguna vez, cuando estaba en la primaria, comencé a leer este libro y no lo terminé. Ahora, en 2024, al proponerme el desafío de mantenerme activo en la lectura en inglés, decidí que uno de mis objetivos debía ser leer algún libro entero en esta lengua. Es así que llegué a la conclusión de leer la versión en inglés del primer libro de Harry Potter. De esta manera cumplí dos objetivos: el planteado en 2024 y el de realizar aquellas tareas pendientes de la infancia.
Recomiendo con mucho entusiasmo leer este libro. Me parece que la principal virtud que muestra acá J.K. Rowling es su habilidad para introducirnos en un mundo distinto. Lo nuevo, en cada párrafo, es presentado con cuidado, sin generar agobio, con la naturalidad con la que aprende un niño de once años. Las escenas son elegidas con precisión: nos muestran nueva magia, pero siempre en un contexto interesante, en el que queremos saber más, en el que la magia se presenta a la mano, ya cotidianizada.
Tratándose de niños de once años, la magia se vuelve un medio para aprender aquello que verdaderamente es difícil de comprender: el mundo. Es el mundo de los adultos, de la historia y la política el que sigue siendo aún un misterio. Lo que se le escapa a Harry es la historia política del mundo mágico y el origen de su propia identidad. En cambio, la magia la incorpora sin problema, pues necesita hacerlo para conocerse y hacerse a sí mismo.