Teo reviewed Kalpa imperial by Angélica Gorodischer (Colección "Narrativa fantástica")
Review of 'Kalpa imperial' on 'Goodreads'
5 stars
De adolescente me encantaban Tolkien, Eddings, R. A. Salvatore y tantos otros autores de literatura fantástica, y creo que si entonces hubiera leído Kalpa imperial, no me habría gustado. Habría preferido personajes menos ambivalentes, finales menos vagos (y probablemente más felices), más del clásico enfrentamiento del Bien contra el Mal, menos corrupción y decadencia y más guerras heroicas, definitivamente más magia y criaturas fantásticas, y (quisquilloso y purista en lo irrelevante) no habría tolerado la intrusión de referencias al mundo real como ocurre en el cuento "La vieja ruta del incienso". Me habrían molestado algunos cuentos a los que no les habría encontrado el sentido y creo que por alguna razón habría preferido más descripciones físicas de los personajes. Quizás no habría podido con algunos aspectos líricos de su escritura. Además, aunque me joda admitirlo y aunque ya había rechazado el evangelismo fanático que mi madre trató de inculcarme, …
De adolescente me encantaban Tolkien, Eddings, R. A. Salvatore y tantos otros autores de literatura fantástica, y creo que si entonces hubiera leído Kalpa imperial, no me habría gustado. Habría preferido personajes menos ambivalentes, finales menos vagos (y probablemente más felices), más del clásico enfrentamiento del Bien contra el Mal, menos corrupción y decadencia y más guerras heroicas, definitivamente más magia y criaturas fantásticas, y (quisquilloso y purista en lo irrelevante) no habría tolerado la intrusión de referencias al mundo real como ocurre en el cuento "La vieja ruta del incienso". Me habrían molestado algunos cuentos a los que no les habría encontrado el sentido y creo que por alguna razón habría preferido más descripciones físicas de los personajes. Quizás no habría podido con algunos aspectos líricos de su escritura. Además, aunque me joda admitirlo y aunque ya había rechazado el evangelismo fanático que mi madre trató de inculcarme, seguía contaminado por su particular moral religiosa: me habría sentido algo frustrado con ciertos personajes femeninos poderosos que a pesar de ser de los "buenos" son amorales o inmorales (cómo se atreven) y algo incómodo con ciertos elementos sexuales de la narración.
Qué bueno que lo leí ahora, entonces. Ahora lo leo y me quedo deslumbrado con el mundo gigantesco, espacial y temporalmente, que esboza Gorodischer. Disfruto con las salidas a veces imprevisibles de sus historias y con el desfile multicolor de sus personajes.
Me gusta que aunque Gorodischer juega con las proporciones desmesuradas de su imperio infinito y la pequeñez de sus habitantes, el comportamiento humano suele ser el centro y motor de sus narraciones (igual, en mi cuento favorito la protagonista es una ciudad). Otro juego recurrente es el del narrador poco fiable: estos no son registros históricos de cronistas y archivistas, son narraciones transmitidas oralmente, interpretadas por los cuentacuentos. Son relaciones míticas, no crónicas históricas, y a veces son diálogos entre varios narradores que cuentan la misma historia desde distintos puntos de vista.
Descubrí otro de mis libros favoritos.
Intertextualidad
Menciones directas:
Pensées (1662) de Blaise Pascal (cita, epígrafe) ("Las dos manos").
Poema "El imperio milenario" en El imperio milenario (1974) de Alfredo Veiravé (cita, epígrafe) ("Acerca de ciudades que crecen descontroladamente").
Mención al personaje de Trafalgar Medrano, de Trafalgar (1979) de Angélica Gorodischer (epígrafe).
Mención a alguna de las tres películas The Charge of the Light Brigade (1912, 1936, 1968), las tres basadas en la carga de la Brigada ligera durante la batalla de Balaclava (1854) en la Guerra de Crimea, de acuerdo a como la cuenta el poema "The Charge of the Light Brigade" (1854) de Alfred Tennyson ("La vieja ruta del incienso").
Mención a la película 2001: A Space Odyssey (1968), basada en el cuento "El centinela" (1948) de Arthur C. Clarke y cuyo guión fue escrito paralelamente a la novela 2001: Una odisea espacial (1968).
Mención a la película Quai des brumes (El muelle de las brumas) (1938), basada en la novela Quai des brumes (1927) de Pierre Mac Orlan ("La vieja ruta del incienso").
Mención a la película Rashōmon (1950), basada en el cuento "Rashōmon" (1915) de Ryūnosuke Akutagawa ("La vieja ruta del incienso").
Mención a la película Porte des Lilas (Puerta de lilas) (1957), basada en la novela La Grande Ceinture (1956) de René Fallet ("La vieja ruta del incienso").
Mención a la película L'Année dernière à Marienbad (El año pasado en Marienbad) (1961), cuyo guión fue escrito por el escritor Alain Robbe-Grillet, influenciado por la novela La invención de Morel (1940) de Adolfo Bioy Casares ("La vieja ruta del incienso").
Mención a la película Gone with the Wind (1939), basada en la novela Lo que el viento se llevó (1936) de Margaret Mitchell ("La vieja ruta del incienso").
Mención a los autores:
-Hans Christian Andersen (Dinamarca, s. XIX) (agradecimientos).
-J. R. R. Tolkien (Reino Unido, s. XX) (agradecimientos).
-Italo Calvino (Italia, s. XX) (agradecimientos).
-Hugo Padeletti (Argentina, s. XX-XXI) (dedicatoria de "El estanque").
-Orson Welles (EEUU, s. XX) ("La vieja ruta del incienso").
-Jean-Paul Sartre (Francia, s. XX) ("La vieja ruta del incienso").
Indirecta:
Las dos historias que cuenta el guía Z'Ydagg en el cuento "La vieja ruta del incienso" son reelaboraciones (en clave de cosmogonía y con guiños humorísticos al mundo cinematográfico) de los clásicos grecolatinos de la Ilíada y la Odisea (ambas ca. s. VIII a. C.), ambas de Homero, así como parte de la trilogía trágica de la Orestíada (458 a. C.) de Esquilo, especialmente las dos primeras obras: Agamenón y Coéforos (ambas 458 a. C.). Aquí Marilyn Monroe es Helena de Troya, Kirk Douglas es Paris, James Bond es Agamenón, Margaret Thatcher es Clitemnestra, Sartre es Orestes, Clark Gable es Odiseo, Walt Disney es Polifemo, la Gioconda es Circe, etc. Y las sirenas son reemplazadas por los ringostárs.
Mención al personaje de Emma Bovary, de Madame Bovary (1856) de Gustave Flaubert.
Mención al personaje de James Bond, agente del servicio secreto de inteligencia británico, cuya primera mención registrada está en Casino Royale (1953) de Ian Fleming.